Descripción

Panceta de cerdo salada a mano con sal marina y secada al aire de nuestra Sierra de las Estancias.

Esta panceta salada o simplemente “tocino”, como se le conoce localmente, está considerada uno de los manjares de la cultura charcutera de nuestra zona. Especialmente consumida en invierno, lo que tendría más sentido antiguamente, como método natural de lucha contra el aire frío y afilado de nuestras sierras, es un producto continuamente presente en las despensas del pueblo, sobre todo, de la gente de más edad. Como todo manjar, los que saben comerlo lo hacen con ese saber antiguo que es la mesura, un pedacito cada vez, “una sopa de tocino con pan” es, de algún modo, nuestra copita de vino al día.

Conservación y utilización

Siempre con un buen pan de pueblo, se come normalmente crudo, cortado en lonchas finas o taquitos, muy a menudo acompañado de ajos crudos. También puede comerse asado, mejor al carbón, o frito, empleado para cocinar platos típicos como las migas o la “fritá”.

Producto curado: se conserva a temperatura ambiente, pero siempre es recomendable en frigorífico.Panceta de cerdo salada a mano con sal marina y secada al aire de nuestra Sierra de las Estancias.